Pocas cosas más satisfactorias hay que preparar tu propio pan en casa, empiezas con tres ingredientes… harina, agua y sal y con tan poco conseguimos algo tan importante como es el pan. Elaborar un pan de calidad es algo complicado, por eso es un oficio tan duro y que cuesta tantos años aprender. Lo que marcará la diferencia será nuestra masa madre, ésta nos ayudará a que nuestro pan tenga una esponjosidad y unos aromas únicos.
La masa madre es un fermento compuesto de harina y agua, que contiene levaduras y bacterias que hacen fermentar el pan. Esta receta es de centeno integral, es un cereal que fermenta muy rápido, siguiendo las indicaciones detalladas a continuación no tendréis posibilidad de error.
INGREDIENTES
55 gr agua mineral
40 gr harina centeno integral
Mezclar los dos ingredientes y guardar en un tarro hermético en un lugar tibio, que podría ser dentro del horno. Transcurridas 24 horas (día 1) simplemente removeremos nuestra futura masa madre con una cuchara, volveremos a taparla y la guardaremos de nuevo.
24 horas después (día 2), observaremos que nuestra masa madre tiene un olor agrio y se empiezan a intuir burbujas. Retiraremos una cucharada de nuestra masa madre, la alimentaremos con la misma cantidad (una cucharada) de harina integral de centeno y la misma cantidad de agua mineral. Volveremos a guardarla hasta el día siguiente.
Al tercer día (día 3) las burbujas serán mas grandes y el olor más fuerte. Volveremos hacer lo mismo, retirando una parte de la masa madre y poniendo la misma cantidad de harina integral de centeno y agua mineral. Al cuarto día (día 4) haremos lo mismo y en el quinto día (día 5) ya tendremos nuestra masa madre lista.
Tendremos una masa muy esponjosa, llena de burbujas y con un olor acido que nos recordará a la cerveza por las levaduras. En este momento guardaremos nuestra masa madre en la nevera donde ralentizará y podremos utilizarla para nuestros futuros panes. Ya no será necesario alimentarla cada día, cada vez que elaboremos pan la alimentaremos.
Dependiendo de dónde viváis, la masa madre puede estar lista al cuarto día o al sexto, suele ser el proceso normal de formación, entre cuatro o cinco días, por eso no os desesperéis si veis que no sale, antes o después se formará. Todos los días de formación la masa debe estar fuera de la nevera, como os decía al principio en un lugar templado de la casa, y en el momento que se forme, guardada en nevera. Ya será un organismo vivo y hay que mantenerlo dentro del frigorífico para que viva.
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Me llamo Tere y soy de Murcia (tierra famosa por sus verduras). Cuando me fui a estudiar a la Universidad empecé a cocinar por una mera cuestión de supervivencia. Hoy, desde la comunidad Las Marías Cocinillas, me gusta combinar y cocinar los alimentos transformándolos en platos con los que disfrutar en familia.
Una vez que tenemos la masa madre hecha en la nevera, ¿Cuánto tiempo dura? ¿Podemos seguir alimentándola cada vez que la usemos y mantenerla indefinidamente? Entiendo que habrá algún momento en que se pondrá mala y habrá que desecharla, ¿no? Lo que me cuesta entender es el mecanismo del mantenimiento de la masa, no tanto el hacerla, a ver si me lo pudiérais explicar mejor porque no me atrevo a hacerla sin saber si cuando pase un tiempo estará «sana» o no. Gracias!!
Perdón por mi ignorancia el tercer dia solo le echamos harina de centeno sin agua?
Si un día te quieres poner hardcore con la masa madre, yo uso una de Reinhart que es #amordelbueno. Siempre había hecho la sencilla de Dan Leppard, pero esta, al 75% de hidratación, me tiene abducida. #masamadreforever.